CON UNA SERPIENTE AL HOSPITAL
Un hombre de 44 años llegó hoy al hospital de la ciudad de Córdoba (Argentina) con una víbora, los médicos pensaron que lo había mordido y decidieron internarlo, pero luego se dieron cuenta que en verdad estaba borracho y ni siquiera sabía por qué andaba con una culebra en la mano.
El hecho ocurrió esta mañana cuando el individuo ingresó al centro asistencial Rawson, de la capital cordobesa, llevando entre sus manos una amenazante serpiente.
Cuando los médicos intentaron interrogarlo sobre los motivos que lo habían llevado a acudir al nosocomio, no obtuvieron respuesta, por lo que la preocupación sobre su estado aumentó.
El hombre, domiciliado en el barrio San Roque, no atinaba a decirle a los médicos lo sucedido, por lo que éstos pensaron, a raíz de su "acompañante", que la culebra lo había atacado y que se encontraba en ese estado como consecuencia de la acción del veneno.
Los facultativos decidieron entonces realizarle un estudio para determinar la gravedad del cuadro y hasta la Policía informó en un parte de prensa acerca de lo ocurrido.
Una vez realizados los estudios pertinentes, los facultativos comprobaron algo que su olfato ya les empezaba a sugerir.
La realidad era que el hombre de 44 años tenía un elevado grado de alcohol en sangre, según se determinó mediante el análisis inicial.
Tal era la borrachera del buen hombre, que nunca se enteró de todo lo que le efectuaron mientras estuvo internado en el hospital Rawson. Ni siquiera sabía sobre su extraña compañía.
"Estaba alcoholizado en realidad, entonces él mismo no era capaz de relatar lo sucedido", relató el médico Andrés Barnes a la radio Cadena 3.
"Cuando hicimos el examen clínico no tenía picadura, pero más a favor del diagnóstico fue que traían el ofidio, traían la víbora y era una simple culebra sin importancia médica", agregó.
Publicado en: http://www.eldia.com.ar/edis/20071122/20071122195051.htm
El hecho ocurrió esta mañana cuando el individuo ingresó al centro asistencial Rawson, de la capital cordobesa, llevando entre sus manos una amenazante serpiente.
Cuando los médicos intentaron interrogarlo sobre los motivos que lo habían llevado a acudir al nosocomio, no obtuvieron respuesta, por lo que la preocupación sobre su estado aumentó.
El hombre, domiciliado en el barrio San Roque, no atinaba a decirle a los médicos lo sucedido, por lo que éstos pensaron, a raíz de su "acompañante", que la culebra lo había atacado y que se encontraba en ese estado como consecuencia de la acción del veneno.
Los facultativos decidieron entonces realizarle un estudio para determinar la gravedad del cuadro y hasta la Policía informó en un parte de prensa acerca de lo ocurrido.
Una vez realizados los estudios pertinentes, los facultativos comprobaron algo que su olfato ya les empezaba a sugerir.
La realidad era que el hombre de 44 años tenía un elevado grado de alcohol en sangre, según se determinó mediante el análisis inicial.
Tal era la borrachera del buen hombre, que nunca se enteró de todo lo que le efectuaron mientras estuvo internado en el hospital Rawson. Ni siquiera sabía sobre su extraña compañía.
"Estaba alcoholizado en realidad, entonces él mismo no era capaz de relatar lo sucedido", relató el médico Andrés Barnes a la radio Cadena 3.
"Cuando hicimos el examen clínico no tenía picadura, pero más a favor del diagnóstico fue que traían el ofidio, traían la víbora y era una simple culebra sin importancia médica", agregó.
Publicado en: http://www.eldia.com.ar/edis/20071122/20071122195051.htm
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